Vida y milagros de los M.M.

Vida cerca de la frontera

--> Une vie près de la frontière

La traduction arrive bientôt!

No suelo hablar de nuestra vida a un cuarto de hora de la frontera, aunque tiene lo suyo de curiosa.
Para empezar, a menudo voy (o vamos) a Espanya, ya sea para poner gasolina y hacer unas compritas, ya sea para visitar la costa o pasear por la montanya. Hoy he ido yo sola, tenia unas cuantas cosas que hacer. Vas acercandote con el coche matricula de Barcelona, el unico -o casi- entre tantos franceses. De repente, llegas al Perthus y una ola de coches de todos los origenes invaden hasta la acera. Esta lleno de gente, con la obsesion de comprar alcohol barato y hasta los hay quienes conocen los beneficios del aceite de oliva y se llevan litros y litros. Es interesante ver loq ue proponen las tiendas: botllas enormes de alcohol, las hay de 2 litros, o mas, de esas que en un supermercado normal de cualquier rincon de la peninsula no encuentras. Pero la gente tiene la impresion de que nosotros tambien las compramos por litros. Luego estan las charcuterias y los jamones, mas caros a veces que en Barcelona, o mas malos. Pero da igual, se venden. Tambien se venden immensas "paelleras" y cazuelas de barro, y yo me pregunto que una vez las compran, cuantas veces las usaran. Quizas las pondran de decoracion. Tambien estan las tiendas de perfumeria, la verdad es que es mas barato, tiendas de ropa mala y fea, tiendas de todo a 100 en donde se venden trajes de sevillanas, munyecos de toros de todas tallas y del peor mal gusto. Hay tambien joyas. Y tabaco, claro. Paquetes y paquetes de tabaco. Cuando llegan las vacaciones las colas en los estancos llegan hasta la calle.
Yo hoy he estado alli. Y he comprado aquellas cosas que no encuentro aqui o las que me salen mucho mejor de precio: frutos secos (sagrados para mi), tomate triturado, olivas rellenas de anchoa, queso manchego (si, en el pais de los quesos, este se echa de menos), garbanzos y lentejas en conserva y el detergente de toda la vida para lavar la ropa. Y recuerdo que cuando estaba en Paris no era posible procurarme tales cosas facilmente, y esperaba que la familia me trajera el fuet y el chorizo para saborearlas.
Tiene sus ventajas estar a un cuarto de hora de tu casa, de tus costumbres, de tus manias, de tu pasado. A parte del gustazo de poder hablarle a la cajera en espanyol.

Proximo capitulo: manyana.

Ecrit par Munchi, le Lundi 2 Juin 2008, 21:09 dans la rubrique "Actualités".

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